Por Jessica Sommerfield
Aunque no lo creas, tener un hijo significa que el IRS puede devolverte dinero. Sí, ¡eso implica reducciones fiscales que devuelven el dinero a tu bolsillo! Estas opciones para cuentas de gastos pre-impuestos, deducciones de impuestos y ahorros para impuestos diferidos pueden darte el respiro financiero que necesitas.
1. FSAs (Cuentas flexibles de gastos) para el cuidado de dependientes
Cuidar de los hijos es un gasto enorme cuando ambos padres trabajan. Los empleadores ahora ofrecen cuentas flexibles de gastos (FSA, por sus siglas en inglés), conocidas como Dependent Care FSA (cuenta flexible de gastos para el cuidado de dependientes), para ayudar a reducir los gastos del cuidado de los niños. Con estas cuentas, se permite a los participantes apartar ingresos pre-impuestos para gastos relacionados con el cuidado de dependientes. Tus ahorros se basan en la cantidad de impuestos federales que pagues. La mayoría de la gente paga entre 15-25% en impuestos federales. Al pagar por la guardería con “ingresos pre-impuestos,” ¡ahorras entre el 15-25% en costos de guardería!
Esto puede aplicarse a los siguientes gastos:
- Guardería
- Preescolar
- Campamento diurno de verano
- Honorarios pagados a una agencia de niñeras
- Programas de guardería antes y después de la escuela
- Pago a familiares (mayores de 19) que cuidan de tus hijos
- Pago a una empleada de servicio cuyas labores incluyen el cuidado de los niños
¿Qué gastos no son elegibles? Los gastos por actividades (lo sentimos, clase de karate) o una niñera que sólo acepta efectivo. Se necesitan recibos, así que piénsalo dos veces antes de emplear una niñera que sólo acepta que le pagues bajo cuerda. Aunque es tu empleado quien fija las cantidades mínimas y máximas con las que puedes contribuir, éstas no pueden exceder los $5,000. Si estás casado pero tú y tu pareja declaran impuestos de manera separada, cada uno puede apartar hasta $2,500.
Estas FSA’s únicamente te permiten hacer declaraciones que puedan cubrirse por la cantidad que está actualmente en tu cuenta. Por ejemplo, si tienes una declaración por una suma importante en el plan anual que excede tu balance, tendrás que esperar para presentarla. Aún así, poder usar dólares libres de impuestos para cuidar a los niños te da la oportunidad de ahorrar significativamente. Si quieres información más específica sobre el programa de FSA para cuidado de dependientes de tu empleador, pregunta en tu departamento de Recursos Humanos.
2. FSAs (Cuentas flexibles de gastos) para atención médica
La ortodoncia, las gafas y las inyecciones alérgicas son muy caras. ¿Sabías que estos y otros gastos pueden ser libres de impuestos? Las cuentas flexibles de gastos para atención médica te permiten apartar ingresos pre-impuestos para gastos médicos que debes cubrir directamente de tu bolsillo y que no están cubiertos por tu seguro médico, incluyendo aquellos que son para tus hijos. Usar FSAs para atención médica también reduce tus ingresos gravables (lo que te beneficiará cuando llegue el momento de hacer tu declaración anual).
Los gastos para ti y tus hijos que entran en esta categoría incluyen:
- Medicamentos recetados, vendajes (y algunos medicamentos que no requieren receta médica, con restricciones)
- Copagos del seguro médico
- Vacunas
- Tratamientos dentales y de la vista (ortodoncia, gafas, lentes de contacto, etc.)
- Gastos y materiales de maternidad (suministros para sacaleche, clases de preparación para el parto, etc.)
- Leche en polvo para bebés necesaria por una condición médica
- Artículos necesarios para el alivio de alergias (recetados por un médico) como humidificadores, vaporizadores, aspiradoras especiales, almohadas, etc.
- Pañales para niños (no bebés), discapacitados o con una condición médica
- Programas de educación especial recetados por un médico
La máxima contribución que se puede hacer actualmente a una FSA para atención médica es $2,550 por cada uno de los esposos. Los fondos deben usarse antes del fin del año fiscal, pero recientemente muchos empleadores empezaron a dar un período de gracia de dos meses para que los empleados trasladaran $500 para el año siguiente.
Pregunta en tu departamento de Recursos Humanos si quieres información más específica sobre el programa de FSA para atención médica de tu empleador. Si deseas una lista de los gastos que pueden entrar en los programas de FSA, tanto de cuidado de dependientes como de atención médica, haz clic aquí.
3. Crédito fiscal por niños y dependientes
El IRS te permite declarar hasta $3,000 en créditos fiscales por un niño, y $6,000 por dos o más niños, en gastos relacionados con el cuidado de los hijos. Esta es una excelente opción si tu trabajo no te ofrece FSAs para el cuidado de dependientes. Incluso si ya lo estás aprovechando, aún puedes solicitar el crédito fiscal por niños y dependientes (Child and Dependant Care Tax Credit) para gastos que superen los $5,000 en gastos declarados en la FSA para el cuidado de dependientes. Si quieres más información sobre los requisitos específicos y gastos elegibles, echa un vistazo a la forma fiscal 2441 en el Tema 602 del sitio web del IRS.
4. Ahorros para niños con impuestos diferidos
Además, hay formas de ahorrar aún más para el fondo universitario de tus hijos. La universidad es muy cara, así que todo centavo ahorrado cuenta. Las mejores opciones incluyen:
Cuentas de ahorros para la universidad 529 – Similares a los planes 401k para el retiro, estas cuentas te permiten apartar ingresos pre-impuestos en una cuenta destinada al ahorro para la universidad. Tú decides cómo invertir para aumentar el dinero. Dado que el dinero que se deposita es pre-impuestos, estás ahorrando más para la educación universitaria de tus hijos. El beneficio adicional es que la Cuenta de ahorros para la universidad 529 puede usarse para pagar cualquier gasto de matrícula universitaria.
Planes de pago de matrícula pre-pagados (529)– En vez de exponerte a los designios de la bolsa de valores, pagas por adelantado la matrícula de la universidad de tu hijo. Como los costos de la matrícula universitaria han aumentado 1,120% en los últimos 30 años, ¡pagarlo por adelantado parece una gran estrategia! Lo único malo de estos planes que están limitados a escuelas participantes. Algunos programas sólo permiten que tus hijos vayan a la universidad dentro del mismo estado, pero el programa Private College 529 cuenta con universidades participantes en más de 35 estados e incluye una lista diversa de universidades entre las que están Stanford y MIT.
Jessica Sommerfield es una estudiante de escritura freelance que disfruta absorber toda la belleza del Noreste del Pacífico y vivir de manera sencilla. Es una entusiasta del fitness, de correr y de encontrar nuevas maneras de comer sanamente sin salirse de presupuesto. Síguela en Twitter: @JessicaLSommer